Al sur del Sur se funden las narrativas del pasado con las esperanzas del futuro y las resistencias del presente.
Hay un lugar, al sur de los sures, donde poco a poco la Cordillera de los Andes comienza a hundirse en las aguas del Pacífico y los fiordos de agua salada se funden con los montes y los manchones de tierra, bosque, cimas y praderas.
Allí, muy cerquita de los abismos de este mundo y los albores de otro muy distinto, al buen resguardo de las aguas del Pacífico está el Archipiélago de Chiloé, una extensión de tierra rodeada de un sinfín de pequeñas islas que en su conjunto albergan una extraña y peculiar cultura insular signada por el clima del sur austral, las raíces Williche y los resabios españoles de antaño.
El siguiente capítulo indaga sobre el actual escenario socioambiental en el archipiélago de Chiloé, marcado por la presencia de un capitalismo extractivista que ha devastado los mares de la Isla Grande de Chiloé y sus alrededores, así como también ha incidido sobremanera en los modos y maneras de habitar en este territorio.
Asimismo, se discute y reflexiona sobre los procesos de organización y los caminos de resistencia posibles de emprender para hacer frente a la vorágine extractivista que ha trizado y resquebrajado el agua de los mares y secado las tierras de este manto sureño sembrado al borde del mundo.